Le enviamos el artículo publicado el día sabado 18 de abril del 09 en el periodico: Reforma Sección: Mundo Pág: 4
Timothy Williams y Tareq MaherBAGDAD - La relativa libertad de un Iraq que acaba de adoptar la democracia y el reciente avance en materia de seguridad han permitido que florezca una subcultura homosexual en Bagdad. La reacción ha sido rápida y mortal.En los últimos dos meses, los cuerpos de hasta 25 jóvenes y hombres sospechosos de ser gays han aparecido en el enorme enclave chiita de Ciudad Sadr, señalan policías y familiares de las víctimas. La mayoría fue asesinada a tiros. Varios de los cadáveres encontrados tenían pegados recados que decían "pervertido", escrito en árabe, indicó la Policía."Tan sólo en las últimas dos semanas, tres de mis amigos más cercanos han sido asesinados", dijo Basim, estilista de 23 años. "Habían planeado ir a un café lejos de Ciudad Sadr, porque no nos sentimos seguros aquí, pero los mataron en el camino. Planeaba ir con ellos, pero por suerte, no lo hice".Se rehusó a revelar su apellido por temor a su seguridad.Los homicidas, explica la Policía, no son sólo los escuadrones de la muerte chiitas, sino también miembros tribales y familiares avergonzados de sus parientes gays.Los clérigos en Ciudad Sadr han exhortado a sus seguidores a que ayuden a erradicar la homosexualidad de raíz en la sociedad iraquí, y la Policía ha iniciado medidas enérgicas contra varones gays."La homosexualidad va contra la ley y es repugnante", afirmó Muthana Shaad, teniente de Policía, en un cuartel en el distrito de Karada, barrio popular entre varones gays.En los últimos cuatro meses, dijo, los oficiales han emprendido una "campaña para limpiar las calles y retirar de ellas a los pordioseros y los homosexuales".Durante mucho tiempo, los gays y las lesbianas en Iraq han sido blanco tanto de los escuadrones de la muerte chiitas como sunitas, pero sus asesinatos han sido eclipsados por los cientos de muertes semanales totales durante el apogeo de la violencia sectaria, en el 2006 y el 2007.En el 2005, el clérigo chiita más influyente del país, el Gran Ayatola Ali al-Sistani, emitió un decreto religioso que señalaba que los gays y las lesbianas debían ser "castigados, de hecho, asesinados".Abu Muhaned al-Diraji, funcionario sadrista en Ciudad Sadr, aseguró que los clérigos de ninguna manera exhortaban a la gente a matar hombres homosexuales."Todo lo que hacemos es aconsejarle a la gente a que cuide de sus hijos", externó Diraji.Algunos jóvenes varones gays, en Ciudad Sadr, se han vuelto nihilistas respecto a la amenaza omnipresente."Ya no me importan las milicias, porque de todas formas me van a matar, hoy, mañana o el día siguiente", aseguró un hombre llamado Sa'ad, quien toma estrógeno y ha desarrollado senos pequeños. "Odio a mi comunidad y a mis familiares. Si se pudieran salir con la suya, el resultado sería un tiro de pistola".
Un Saludo
Comité Coordinador
José Angel Aguilar Gil
Información Red Electronica
Ricardo Fonseca Ceja
Ma. de Lourdes Camacho Solis
Un Saludo
Comité Coordinador
José Angel Aguilar Gil
Información Red Electronica
Ricardo Fonseca Ceja
Ma. de Lourdes Camacho Solis
No hay comentarios.:
Publicar un comentario