martes, mayo 12
Las Condoneras y su paso por Ocotal
Travestías del Condomóvil en Centroamérica
Mario Alberto Reyes- enviado
Ocotal, Nicaragua, mayo 12 de 2009.
La actividad de Las Condoneras inició desde las 9:00 horas, justo cuando el Condomóvil se detuvo frente a la Casa de la Cultura de esta localidad. Se trata de una construcción de finales del siglo XIX ubicada en la avenida principal, cuyo mérito histórico radica en que en 1921 fue ocupada por las tropas estadounidenses que invadieron esta nación.
De acuerdo con Rhanfis Silva, un joven nicaragüense de 30 años de edad, la edificación sirvió de cuartel para los soldados de los Estados Unidos encargados de bombardear por vez primera una ciudad centroamericana.
Una vez concluida la narración del hecho histórico, inicia el trabajo rudo de los activistas. La colocación de los carteles alusivos a la prevención del VIH/sida, de las carpas que servirán para que las personas interesadas en realizarse la prueba de detección reciban una adecuada preconsejería, y posteriormente les tomen una muestra de sangre, lleva poco más de media hora.
La práctica cotidiana hace que Polo, Marco, Bernardo y José Antonio, “El Abuelo”, agilicen la tarea, incluida la colocación del condón de siete metros de altura. Una hora después, los activistas de la organización civil mexicana Colectivo Sol se declaran listos para iniciar la jornada.
La primera persona en animarse a hacerse la prueba, es un hombre alto, moreno, de aproximadamente 35 años de edad. La decisión se refleja en su rostro. Comienza el proceso. Bernardo le informa acerca de la epidemia, Marco es el responsable de guiarlo en el llenado del formato de consentimiento informado. “El Abuelo” es quien le da el pinchazo, y tras un periodo de 15 minutos, Polo es quien le notifica el resultado.
Jorge accede parcamente a charlar con NotieSe y después de dar gracias a la Virgen de La Asunción -venerada en la mayor parte de Nicaragua-, destaca la importancia de realizarse la prueba, pues no obstante han sido pocas las veces que le ha sido infiel a su “jaña” o “vieja”, enfatiza que nunca está de más cuidarse.
Un grupo de jóvenes de bachillerato se acerca a observar los carteles colocados en las rejas responsables de proteger el hermoso jardín central de Ocotal, el cual tiene muchas especies de árboles, flores y plantas, perfectamente cuidados por las autoridades municipales.
Cualquier momento es aprovechado por Polo Gómez para acercarse a la población. Es sorprendente su capacidad para “conectar” con la gente. Así lo demostró la tarde anterior después de la conferencia de prensa y de acudir a una entrevista en Mundo Joven, emisión conducida por Elia Tercero, en Radio Segovia.
Luego de salir de la estación, Ariel González, el psicólogo del Centro para la Educación y Prevención del Sida (Cepresi), nos llevó a la colonia 26 de septiembre. Ahí, en medio de una enorme cancha llanera de fútbol, más de una veintena de jóvenes daban rienda suelta a sus dotes de balompié. La llegada del Condomóvil siempre es notoria. Los colores del arcoiris y los inevitables y amistosos saludos que los activistas lanzan por las ventanillas, hacen imposible que pase desapercibido.
Rudos en las formas, los jóvenes y adolescentes evidencian a todas luces haber recibido una formación sexual tradicional, llena de estigmas y prejuicios, sin embargo, resulta grato ver cómo aceptan de inmediato la invitación de Polo Gómez para acercarse a recibir información sobre el uso correcto del condón.
Rodeado por los jóvenes, Polo se los echa al bolsillo de inmediato. Su origen humilde y su vida en la colonia Guerrero, una de las más bravías de la capital mexicana, son factor decisivo para saber cómo llegar a estos “cipotes” o adolescentes.
El albur no se hace esperar, es algo muy mexicano, pero los jóvenes de este popular barrio lo entienden y aprenden de inmediato. La sed de aprendizaje deja anonadado a más de uno. Dicen que nunca les habían dado información al respecto. Participan, juguetean, alburean y se informan.
Ahí mismo, tres de ellos se animan a realizarse el examen de detección. Ninguno es positivo, y prácticamente todos se despiden agradeciendo la visita de los mexicanos, incluido un consejal del municipio, quien momentos antes se había acercado para ver lo que sucedía.
Así pasó con los bachilleres del parque central, dos de los seis “cipotes” se aplicaron la prueba, tampoco son seropositivos. Los activistas del Cepresi no daban crédito. Se dicen sorprendidos por la respuesta de los lugareños, pues cuando ellos realizan alguna actividad similar, sólo un promedio de 12 personas acuden en todo el día. Hoy, en unas cuantas horas, 53 personas se hicieron la prueba. Ninguno porta el virus.
Tras la ardua jornada, los activistas deciden comer en un lugar llamado Dipilto, junto al río del mismo nombre. No hay más de media hora de distancia en carretera, sin embargo, el sofocante calor de Ocotal queda atrás para dar paso a un refrescante clima favorecido por la altitud de las montañas.
La comida nicaragüense se caracteriza por incluir abundante arroz en casi todos sus platillos. El gallopinto es una mezcla de arroz con frijoles. Tradicionalmente se acompaña con pollo asado, “chimol” o pico de gallo, un trozo de queso blanco, papas fritas y un par de tortillas.
Amablemente la mesera ofrece “granadilla”, una bebida elaborada con la fruta del mismo nombre. El tono rojizo potenciado por un par de hielos, la hace aún más apetecible ante los ojos de los sedientos comensales.
Loma Santa es un poblado cercano a Ocotal y está ubicado en una zona montañosa. Se caracteriza porque en el cerro más alto existe un templo que durante algún tiempo estuvo dedicado a la Virgen de Guadalupe, ahora está en pleno abandono. Aún así, las ruinas son sumamente llamativas para los paseantes.
A un lado del templo, lo único que testifica la adoración a la guadalupana, es un altar en el cual está su efigie acompañada por la de Juan Diego. La belleza del lugar puede apreciarse en todo su esplendor desde estas alturas. El retorno se hace inevitable ante la necesidad de preparar las maletas para continuar con el recorrido por este atractivo país centroamericano.
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